La Drácena, la reina de la decoración minimalista

La tendencia por la decoración minimalista ha ido invadiendo nuestros hogares y ha llegado a las plantas de interior por eso, son muchas las personas que eligen plantas con un follaje más arquitectónico y menos floración como las Drácenas.

Hoy en la Trastienda de Quedeflores.com vamos a hablar de esta planta que es originaria de África, presenta una buena adaptación a cualquier medio y comprende unas 40 especies diferentes.

A pesar de que es una planta muy resistente necesita algunos consejos para su cuidado:

• Es muy importante el riego, en primavera y verano necesitará riegos abundantes, como mínimo dos veces por semanas pero sin llegar a encharcar la tierra. En otoño e invierno podemos regarla más espaciadamente pero sin dejar secar la tierra entre riego y riego.
• Deben de tener mucha luz durante todo el año, no hay que olvidar que es una planta tropical. Su temperatura ideal es entre los 20º y 25º C y nunca menos de 10ºC.
• Si el ambiente es muy seco, es conveniente pulverizar la planta con agua pero debemos evitar que el agua quede en las hojas porque esto podría amarillearlas.
• Es necesario echarle abono cada 15 días desde la primavera, más o menos desde el mes de abril, hasta finales de agosto.
• También debemos tener en cuenta que debe evitarse situar la planta en un lugar donde reciba corrientes o cambio de temperatura así como estar cambiándola de lugar.

Problemas a los que se enfrenta

Uno de los principales problemas que puede tener la Drácena es que sus hojas comiencen a ponerse amarillas, esto nos está indicando o bien que la estamos regando demasiado o que no le llega la luz suficiente. Para solucionarlo debemos reducir el riego y trasladarla a un lugar de la casa donde haya más luminosidad.

Por otro lado, la araña roja y la cochinilla son las plagas que suelen atacar a estas plantas. Si nuestra Drácena se ve afectada por la araña roja, debemos fumigar con un producto especial para este insecto. En el caso de la cochinilla, un remedio muy útil es limpiar sus hojas con un algodón impregnado en alcohol, eliminando los posibles habitantes.