Una de las plantas más demandadas en esta época es la flor de Pascua. Originaria de México, llego a Europa a finales del siglo XIX y se ha convertido en todo un símbolo de las Navidades lo que hace de ella un regalo ideal para estas fechas.
Aunque se piensa que las flores son las “hojas” de color rojo, las verdaderas flores son amarillas, muy pequeñitas y poco llamativas. Las flores aparecen a finales de Noviembre y suelen aguantar hasta mediados de abril, aunque su momento de mayor floración coincide con la época navideña por lo que también se la conoce como “Estrella de Navidad”.
Uno de los principales problemas de su cuidado es saber darle un riego correcto. Si se encharca demasiado la planta es probable que se pudra y una escasez de humedad hace que la planta termine secándose. Lo ideal, es crear un ambiente húmedo, algo que se puede hacer perfectamente colocando un humidificador o un cuenco con agua sobre una estufa para que se evapore.
Es conveniente hacer riegos habituales pero escasos y dejar secar el terreno entre uno y otro, hay que tener en cuenta que la principal causa de muerte de estas plantas es un mal riego. Si vemos que la planta se pone negruzca lo conveniente es dejar de regarla, podar la parte que esté dañada y retirarla a un lugar sombrío hasta la próxima temporada que volverá a brotar.
En cuanto a su colocación, lo más apropiado es situarla en un lugar luminoso y cálido, la temperatura ideal es entorno a los 18º Centígrados. No hay problema con que le dé el sol directo en otoño, invierno y primavera, pero en verano, que la luz es más fuerte, debemos protegerla. Hay que tener en cuenta también que es una planta que no soporta los cambios de temperatura y las corrientes de aire.
En quedeflores.com sabemos que regalar una flor de Pascua, es una de las mejores maneras de desear unas felices fiestas y queremos daros estos consejos para que vuestra “Estrella de Navidad” os acompañe también el año que viene.
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